La hora de los cuatro decoders

Tras una semana de intento de desconexión futbolística, nada mejor para reenchufarse que la hora más intensa de la temporada. Durante cuarenta minutos de estrés y complejo de zapping han coincidido cuatro partidos de enorme importancia. Las segundas partes del Juventus-Palermo y del Parma-Milan bailaban entre la sentencia y la emoción y se ha estado cerca tanto de la consecución matemática del título para el equipo turinés como de que se abriera aún más la lucha y se llegara a la última jornada con sólo un punto de diferencia. Mientrastanto, en Inglaterra empezaban el emotivo Arsenal-Wigan y un West Ham-Tottenham aún más importante (porque sin tropiezo de los spurs, lo de Highbury no servía de nada) con esa cuarta plaza en juego que es una invitación a la fiesta más selecta del continente: si no estás no formas parte de la alta sociedad. Era una tarde para tener cuatro decoders y cuatro televisores o para volverse loco con el mando a distancia. ¿Qué partido elegir? Cuando crees que el Milan lo tiene hecho marca Corradi. Cuando la Juve ya ha finiquitado ante el Palermo, aparece Godeas. Quien haya visto en directo todos los goles de los cuatro partidos merece un premio. ¡Qué intensidad! ¡Qué gozada! No sé si quiero que suceda esto todas las semanas o que no pase nunca más.

Se puede decir que hoy la Juve ha ganado más de medio Scudetto. Mantiene tres puntos de ventaja sobre el Milan, con lo que le basta con empatar ante la Reggina la semana que viene. Y ojo, que el partido no es en Reggio Calabria, ya que el club sureño tiene su estadio cerrado. Muy probablemente, el encuentro se disputará en Bari, lo que supondrá otra ventaja más para el equipo de Capello. ¿Viajarán muchos hinchas para un partido en el que su equipo ya no se juega nada? ¿Serán los suficientes para crear ambiente en un campo que es enorme? Ya en condiciones normales la Juve sería muy favorita ante un conjunto discreto que se ha ganado la permanencia por su capacidad de trabajo pero que no cuenta con ningún jugador que pueda considerarse de nivel alto. Más difícil en cambio será el compromiso del Milan ante una Roma que aún sueña con la cuarta plaza. La fiebre ha retardado hoy el retorno de Totti y sus compañeros han sufrido demasiado ante el ya descendido Treviso. Parece pues que la cuarta plaza será para la Fiorentina, que cuenta con dos puntos de ventaja y viaja a Verona para medirse a un Chievo que celebrará su acceso matemático a la próxima UEFA. La otra incógnita que quedará para la última jornada es la plaza de Intertoto: será para el Palermo si gana el derbi siciliano ante el Messina, pero el Livorno intentará aprovechar ante el Siena un tropiezo de los isleños.

Y lo de Highbury ha sido memorable. Una tarde inolvidable. Clasificación para la Champions y hat-trick de Thierry Henry, la mayor leyenda de la historia del club, para despedir a un estadio mítico. Y ahora diez días para preparar la final de París. La única distracción para el Arsenal serán los rumores sobre el futuro de Henry, que hoy parece más cerca de quedarse. El cuarto puesto ha sido posible gracias a la inesperada derrota del Tottenham, que empezó a cimentarse en la cena de ayer. Gran parte de la plantilla sufrió una intoxicación alimenticia y muchos jugadores se han encontrado realmente mal durante la noche y la mañana de hoy. El partido de Upton Park ha corrido peligro y de hecho la Premier League ha ofrecido a los Spurs la posibilidad de retrasarlo dos horas. El staff médico ha considerado que no se ganaría nada con ello y finalmente Martin Jol ha alineado a todos los titulares. Muchas crónicas inglesas han visto a los jugadores del Tottenham cansados e indispuestos durante el partido y sin duda este percance puede justificar en gran medida un resultado que pocos esperaban. Martin Jol reveló en la rueda de prensa que Carrick y Dawson jugaron estando enfermos y elogió a sus hombres, a los que calificó de héroes pese a la derrota. La jornada garantizó también la segunda plaza para el Manchester United, aunque la hinchada de Old Trafford anda preocupada por el futuro de Ruud van Nistelrooy, que abandonó el estadio al saber que no iba a jugar ante el Charlton. Que estén atentos los grandes clubes europeos que buscan un delantero, porque aquí puede haber una presa fácil...